lunes, 1 de diciembre de 2014

A Sol y Sombra


En agosto de 1973 cuando el Maestro Cruz Diez estuvo en Ciudad Bolívar se nos ocurrió preguntarle sobre el Color, básico en su trabajo de fisicrómia cinética, a propósito del poemario de Luz Machado "A Sol y Sombra", si realmente el Blanco y el Negro existen como color y esta fue su respuesta:  Por lo que se sabe, no existen como tales en el abanico de la descomposición de la luz, es decir, rojo, anaranjado, amarillo, verde, azul, violeta, todos típicos del arco iris o espectro solar aceptados como colores fundamentales. A partir de ellos se pueden obtener los demás colores conocidos, aunque también han sido aceptados como básicos, además del azul y el verde esmeralda propiamente, el azul turquí y el verde vegetal. El blanco y el negro no aparecen porque no representan a ningún color sino que se representan a sí mismos De todas maneras, el color tiene cualidades que lo caracterizan. Tal es el tono determinado por la propia particularidad del color  Albers decía que tenía más de cien amarillos en sus anaqueles. Una de las  cualidades sería esa fuerza emotiva que lleva a creer que existe una relación del color con los diversos estados de ánimo. Así por ejemplo, el rojo sugeriría pasión, violencia, fuego; el amarillo,  la ira, la envidia, la maldad; el verde, la juventud, la abundancia, la frescura, la esperanza; el azul, lo infinito, el frío, la melancolía; el violeta, la tristeza, el dolor,  mientras que el blanco  simbolizaría la pureza o “la síntesis de la luz” como dijera el pintor del abstraccionismo  ruso, Vasil Kandinsky (AF)




No hay comentarios:

Publicar un comentario